Una mujer trans británica, ha logrado conseguir que su pensión sea otorgada luego de 10 años de lucha haciendo valer su reconocimiento de identidad de género.
Un fallo histórico del Tribunal de Justicia de Europa, ha reconocido a MB (como figura en sus documentos identitarios), como víctima de un acto de discriminación por parte de del Gobierno británico al negarle su pensión.
Como ley, el Reino Unido a aquellas mujeres que nacieron antes de 1950, se les permitía ser elegibles para una pensión a la edad de 60 años, mientras que los hombres acceden a ello a los 65 años de edad.
MB, realizó su solicitud en la edad estipulada y cumpliendo con lo requerimientos para ello, sin embargo, el departamento de Trabajo y Pensiones negó tal solicitud alegando a que ella no era legalmente una mujer, mediante un documento que se expide bajo la ley de reconocimiento de género a las personas trans.
Para hacer valido esta documentación, las personas transgénero que se hayan casado hasta el 2014 deberían efectuar su divorcio para hacer el proceso, ante ello, MB se niega a separarse de su pareja.
Tras haber cumplido sus 70 años, MB fue elegible luego de sus 65 como se estipula la ley para un hombre.
Este caso de discriminación fue presentado ante el Tribunal supremo del Reino Unido, y de allí, pasado al Tribunal de Europa, donde se da el fallo a la mujer trans debido a que ninguna persona trans debe anular su relación a cambio de redimir su derecho de reconocer su género legalmente.
Con base en esta situación, se determinó pagar su pensión como es debido y dar el reconocimiento de género como persona trans sin anulación de ninguna unión marital.
Aunque este ha sido un hecho de retribución, quizá aún pequeña para todo lo que abarcan los problemas de discriminación y más en la población trans, se prevé que a partir de ello se abran puertas a la reforma de algunas leyes que permitan el correcto desarrollo integral de la persona diversa, un importante avance en pro de la igualdad y el respeto.
