Quizás les suene raro el título de este artículo pero lo acabo de vivir en carne propia. No podemos negar que los gays somos los reyes del “cliché”.
Por un lado lo somos y seguimos los estereotipos y por otro muchos reniegan de ellos. A mi no me molestan, creo que siempre van a existir. Lo importante es cambiarlos libremente cada que queramos, cada que algo dentro de nosotros nos pida renovarnos.
Los clichés son como la moda, siempre existirán pero irán cambiando, por lo que deberían de ser divertidos. Son como la ropa del closet que uno puede ir escogiendo cada día dependiendo del humor.
Ahora, en este afán de ser aceptados entre nosotros, de siempre estar buscando el reconocimiento y los “Likes”, de ser populares, de sentirnos a la moda o en tendencia, de pronto las barbas se apoderaron de nosotros.
Yo creo que el gay que hoy en día no tiene barba es porque o no le sale o porque ya se cansó de ella. Pero seamos honestos ¿Quién no ha intentado dejársela crecer? (La barba).
El cliché gay de hoy es el prototipo de los machos de antes, lo que consideramos varonil, rudo, tosco, macho, morboso, madreador,… Ja, ja, ja.
Repito, me parece muy bien, pero ¿qué tanto nos sentimos obligados a seguir los clichés y estereotipos?
Me encanta la barba y los hombres barbones. Por casi 4 años la usé y ayer en la noche me di cuenta que no me atrevía a quitármela, entonces, al hacerme consciente de esto, me levanté de la cama, dejé a mi novio hablando solo, me metí al baño y salí con look de ¡Freddie Mercury! Ja, ja. Él me dijo: “¡me gustaba tu barba! ¿Qué hiciste?” Yo le respondí: “Cállate y ponte de buenas, haz de cuenta que te estás acostando con otro”.
Emocionalmente necesitaba un cambio y en ocasiones funciona modificar algo en nuestra apariencia física. Además me parece refrescante verme al espejo y encontrar algo distinto en mí.
Trabajo en la web y con mis redes sociales. Tengo muchos amigos y seguidores y la reacción al cambio cuando me vieron sin barba fue positiva (cosa que me dio gusto). Ahora dicen que parezco actor porno de los 70’s. ¿Ubican a Magnum (Tom Selleck)? Venga TONES, que seguro saben de quién estoy hablando. Así que ahora tengo un nuevo cliché.
A mi me fue bien, pero conozco actores gays que al quitarse la barba, sus seguidores se les fueron encima, los insultaron y hasta se dieron de baja de sus redes sociales. Cuando esto sucedió me sorprendí y me inquietó mucho el ver de parte de la población gay la mala vibra, la crueldad y el poco respeto en sus comentarios hacia alguien que lo único que hizo fue rasurarse la cara. Eso sí, le quedó como nalga de bebé. Ja, ja. Ya ven, siempre criticamos, o bueno, hacemos observaciones. Eso no cambiará nunca. Por lo que abogo en esta ocasión es por atrevernos a cambiar, a fluir con lo que sintamos sin importarnos la opinión de los demás.
Exploremos todos nuestras opciones y descubramos nuestro propio estilo. Ah, y cambiémoslo cada que lo consideremos necesario.
Una de mis palabras favoritas es “identidad”.
¿Quién tiene ganitas de quitarse la barba pero no se atreve? ¿Qué opinan? Les comparto mi blog. ¡Abrazote!
Está bien, aquí les voy sin barba…. Ja, ja
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