En la mañana de ayer martes, Michelle Suárez se convirtió en la primera mujer trans en hacer parte del Senado Uruguayo.
Esta mujer está abriendo las puertas a su población en Uruguay. No le bastó con ser la primera mujer transexual en graduarse de una universidad como abogada, ahora, asume el puesto de senadora en suplencia de Marcos Carámbula en el Partido Comunista.
Suárez nació en 1984 en Salinas, Canelones, afirma que su niñez fue feliz pero que su adolescencia fue difícil ya que su transición comenzó a la edad de 15 años. Desde el 2009 se moviliza en temas sociales civiles y en 2010 ayudó en la redacción del proyecto de ley sobre matrimonio igualitario.
En el 2013 por invitación de un amigo se une al Partido Comunista al que representa desde hoy como Senadora. Dice que decidió dejar a un lado su propio confort y de alguna manera su libertad política para luchar por sus convicciones desde el interior de sistema político que necesita cambios y nuevas ideas.
“Apuesto a una sociedad más justa y menos discriminatoria”, dijo este martes mientras se posesionaba en su nuevo cargo. El logro alcanzado por Michelle es inmenso, la población LGBT es un sector fuertemente excluido en la sociedad uruguaya donde constantemente se ven vulnerados sus derechos, aunque el país tiene grandes avances sociales.
Esta mujer llega a dar un nuevo punto de vista, busca influir en las acciones de una sociedad que espera, sea más abierta e incluyente, quiere que su trabajo y logros inspiren e impulsen a personas trans al alcance de sus objetivos y goce de su vida plenamente.
Su cargo en el senado jugará un papel fundamental en el desarrollo de leyes integrales para la población LGBT, entre ellos un proyecto que ya ingresó al parlamento y que comenzará a ser estudiado por parte de la comisión de población y desarrollo de la Cámara de Senadores.