Un extenso artículo del periodista y activista homosexual Andrew Sullivan, de la revista norteamericana ‘Newsweek’, elogia la política de defensa de los derechos LGBT que viene desarrollando Barack Obama, a quien llega a definir como como “el primer presidente gay”.
La noticia llega una semana después de que el “líder del mundo libre” (sic) se posicionara por primera vez públicamente a favor de las bodas entre homosexuales, y repasa los pasos que en estos últimos ocho años viene dando el político demócrata.
Es el propio Sullivan el que reconoce el manejo de los tiempos y la estrategia desarrollada por Obama para no forzar la inclusión de asuntos como el matrimonio gay en la agenda política hasta haber logrado un clima de aceptación generalizada en la opinión pública estadounidense. “Una política fría y calculadora en defensa de los derechos civiles”, que no pasa por alto que “uno de cada seis de los recaudadores de fondos de Obama es gay”, y avances importantes como el conseguido en el Ejército, con el carpetazo a la doctrina de “no preguntes, no digas”.
Tampoco deja pasar por alto el periodista que “la secretaria de Estado Hillary Clinton ha dado un discurso por primera vez afirmando que, para los Estados Unidos, los derechos de los homosexuales son parte integral de los derechos humanos en todo el mundo, y en consecuencia, los EE.UU. llevarán a cabo una diplomacia en este sentido”.
Escribe Sullivan: “Él era un chico negro criado por sus abuelos blancos y una madre soltera blanca en Hawái e Indonesia. Barack Obama tuvo que salir de un armario diferente. Tuvo que descubrir su identidad negra y conciliarla con la de su familia blanca, del mismo modo que los gais descubren su identidad homosexual y la concilian con la de su familia heterosexual. Obama aprendió a ser negro del modo que los gais aprenden a ser gais”.