A través de nueve retratos de personas de distintas edades y sexos, el fotógrafo relata los estados y sentimientos de las personas transexuales.
La Sala Vaquero Poblador acoge hasta el 28 de mayo la exposición fotográfica I Want to be a Butterfly, del artista granadino Ángel Guzmán. Dicha muestra forma parte de la programación de L@s Palom@s 2016.
Las fotografías dialogan entre sí con la excepción de Mariposa (2015). Esta fotografía abriría o cerraría la exposición puesto que, por un lado, representa de un modo literal el título de la exposición y, por otro, condensa todo el subtexto de las otras nueve obras: la transformación y el renacimiento. Las fotografías consiguen crear con gran maestría escenas a caballo entre lo cotidiano y lo marginal, lo lúgubre y lo alegre, lo trágico y lo dichoso, lo individual y lo colectivo.
El fotógrafo Ángel Guzmán explicó el proceso de cómo se puso en contacto con estas personas transexuales, que “confiaron en mí, en el trabajo y en el proyecto”. “Quería hacerles protagonistas de sus propias vidas, en esas fotografías, estoy muy satisfecho con el resultado”, añadió el artista.