Escrito por Susana Calle y Mateo Rojas.

«Poder disfrutar de los recuerdos de la vida es vivir dos veces», así lo expresaba el gran poeta de la antigua roma, Marco Valerio Marcial; vivir dos, tres y hasta cuatro veces es lo que caracteriza al barrio El Garabato en El Poblado, comuna 14, desde la calle 4 sur, hasta las carreras 29 A y 29 C. Este barrio de estratos 1 y 2, está rodeado por la inmensidad del centro comercial El Tesoro y edificios de lujo, pero tiene espacios coloridos y artísticos que sobresalen y evidencian la riqueza cultural de su comunidad.

El Garabato, De palo de madera a barrio: esa es la metáfora El Garabato, egoCity LGBTIQ Diversity Network
Celebración en El Garabato, década de los 90, cortesía de Wilmar Loaiza

Es un territorio de pujanza y amor, ha sobrevivido a tres siglos abrazando la identidad personal y familiar como símbolo de resiliencia social. El Garabato, como lo conocemos los pobladeños de cuna, o Los Naranjos, como lo conocen los nuevos pobladeños, es un sector que se ha mantenido firme en el tiempo y espacio a pesar de todos los cataclismos que los ha golpeado. Fue el lugar que heredaron aquellas familias descendientes de los esclavos que habitaban el territorio de El Poblado, que con gran esfuerzo y dedicación fueron desarrollando, cultivando y expandiendo sus actividades por todo el sector; hasta el punto de expandirse a través de varias generaciones marcando un impacto territorial de alto valor para todo el territorio y el resto de la ciudad de Medellín; como lo fueron las familias Ochoa, Chaverra, Galeano, Mesa, Ángel, Loaiza, entre otras.

El Garabato ha sido testigo de la ardua transformación que ha tenido el territorio de El Poblado, pasando de un momento meramente agrícola, en el que sus primeros habitantes se desempeñaban como ñapangos o mayordomos de las fincas que componían este sector; hasta la expansión urbanística a sus alrededores, en la que los nuevos pobladeños han querido borrar del mapa el génesis y la identidad de un sector fundacional en nuestra comuna.

¿Has escuchado hablar de los perritos de la UVA? ¡Ese es el Garabato! Este barrio simboliza la capacidad de adaptación de las comunidades frente a la rápida evolución de su entorno. Aquí encontrarás la UVA, restaurantes callejeros, cafés, tiendas ideales para “parchar”, expresiones artísticas urbanas y una variedad de ofertas económicas y culturales que siguen nutriendo la autenticidad del barrio. Todo esto ha contribuido al desarrollo comunitario, en beneficio tanto de sus habitantes como de los visitantes que llegan atraídos por su esencia.

Tú que estás leyendo, y que tal vez no eres un pobladeño de cuna, es decir, llevas muy poco tiempo habitando nuestras calles y barrios de El Poblado, te invito para que conozcas la historia este hermoso territorio y descubras todos y cada uno de los tesoros que enmarcan un territorio de transformación e impacto social, pero también de familia, vecindad, arte, cultura, biodiversidad y amor eterno por cada rincón de nuestro Poblado.

 

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí