Los ganadores del concurso #NecesitamosMásBesos nos comparten su historia de amor, el suceso del primer beso y nos invitan a darnos más besos.
El pelirrojo y el peli negro; sus miradas se cruzan y solo transmiten tranquilidad. Descomplicados, sencillos y risueños se sientan ante el lente de egoCity para narrar lo que #NecesitamosMásBesos les dejo, una experiencia que los llevará a España próximamente y los invitó a desmentir el paradigma de los besos en medio de la cultura machista latinoamericana.
Daniel y David, los doble D; una pareja serena, sin mucha pretensión que en el espacio parecerían no ser una pareja melosa porque no necesitan estar encima el uno del otro para demostrarlo, pero su conexión es tal que en el ambiente se siente que corre amor.
Era imposible no evitar preguntar por el nacimiento de ese afecto. Ambos se miran y dicen no fijarse en fechas, ni aniversarios, viven el momento y que por ello no pueden establecer con exactitud los detalles de su primer encuentro.
Lejos de la tecnología, del mundo de las relaciones efímeras y el fastlove esta pareja se conoció en el Metro de Medellín. Personas en común, sin saberlo, los habían invitado a disfrutar de una salida a las afueras de la ciudad, era un encuentro con amigos pero allí no solo quedó un lindo lazo de amistad sino que inmediatamente se respiró algo más allá.
Estación tras estación se intercambiaron miradas; Daniel dice “ese pelirrojo me dejó impactado”. El punto de encuentro era en la estación Niquía (la última al norte de Medellín) e “increíblemente nadie llegó a tiempo, fuimos los únicos”, señala David. Fue el momento en el que Daniel se lanza al ruedo y termina por preguntar “parce, ¿vos vas pa’ la finca?”.
Casi dos horas esperaron a sus demás amigos y compañeros de viaje, eso basto para el contacto inicial de lo que sería una relación que hoy lleva aproximadamente 4 años o más.
El primer beso surgió en aquella finca, exactamente no pueden recordarlo pero si saben que fue un pacto que hasta hoy los mantiene unidos. Lo que bien recuerda Daniel es la despedida, en el Metro, era el final del día festivo, el beso público que se efectuó en medio de uno los vagones para decir “hasta pronto”, era una despedida pero al mismo tiempo el inicio de algo muy bonito que aún no tenía rumbo fijo y estaba lleno de las incertidumbres propias del inicio de una relación, que para su momento no tenía ni siquiera tal nombre.
Nunca se han negado un beso en público, sienten que es algo que se debe “normalizar”; aunque aún no se tenga clara la línea entre lo normal y lo anormal de las relaciones homosexuales.
Sienten que es necesario darse más besos en público, más besos en los parques, balcones, aceras, zonas comunes como lo hicieron en su video donde recorrieron lugares icónicos de Medellín y municipios aledaños para demostrar su amor.
Se vieron lanzados a apoyar #NecesitamosMásBesos por iniciativa de ambos, el atractivo del premio y porque ambos sienten que un beso no tiene nada de malo. Se enteraron del concurso desde egoCity, vieron el respaldo de Jack’D y demás aliados iberoamericanos y no dudaron en buscar donde podían hacer el rodaje de sus besos.
La pareja al vivir la coyuntura actual de Colombia y toda iberoamérica, luego de ver las reacciones de #NecesitamosMásBesos y bajo esa inmensa discriminación que vivimos día día, invitan a que sin pena, cuando surja y sin temor nos lancemos a darnos besos en público.
“Vamos este viaje a España como una oportunidad para darnos más besos”, concluye la pareja que ya está próxima a arribar a Barcelona como incentivo por su beso.