El Ministro de Salud ruso propone regular un tratamiento para personas con “trastornos de identidad sexual”.
El Ministro de Salud ruso, Georgiy Gubanov, propone una nueva regulación para la creación de espacios centrados en el tratamiento de personas con lo que denomina “desorden de identidad sexual”, “trastorno de la preferencia sexual” y “pedofilia”. Recomendaciones que forman parte de un paquete de enmiendas de regla que rigen el cuidado de los “trastornos mentales del comportamiento”. Tales propuestas han sido compartidas de manera pública en una web del gobierno a la espera de que los ciudadanos puedan expresar su opinión al respecto.
Un borrador que señala necesarias unas “salas de examen de sexología” en hospitales psiquiátricos y centros de atención primaria, en los que los profesionales de la salud proporcionarán asesoramiento a “pacientes con enfermedades relacionadas con problemas de identificación de género, desarmonías sexuales y desviaciones”. Asimismo, también serían capaces de diagnosticar y tratar “desviaciones sexuales entre niños y jóvenes” y “consultar a los jóvenes sobre su educación sexual y su conocimiento sobre género”.
El reglamento propuesto especifica que las salas de examen sociológico deben estar equipadas con “al menos un dildo”. Aunque el uso de un dildo es obvio, lo que no está claro es su propósito de cara a un examen, cuyo uso en mujeres que experimentan fuertes dolores durante el coito ha discutido en el pasado por la Asociación Rusa de Psiquiatras.
Gubanov también estuvo detrás de las regulaciones emitidas en enero de 2015, que prohibía que las personas transgénero obtuvieran su permiso de conducir, pero que no parece haberse llegado a poner en práctica. Esta propuesta sale a la luz el 19 de febrero, mismo día en que la legislación rusa rechazaba una propuesta que habría castigado a las personas LGTB que comparten su orientación sexual públicamente. Se trataba de la primera propuesta contra el colectivo LGTB considerada desde la aprobación de la llamada “ley de propaganda gay”, aprobada en 2013.