Desde 1999 venimos luchando por una igualdad de derechos, y solo hasta ayer recibimos la legalización del matrimonio igualitario.
Desde el nacimiento de nuestro medio, en 2103, hemos relatado las historias, noticias y sufrimientos que como comunidad nos ha tocado vivir para llegar al veredicto que ayer irrevocablemente la Corte Constitucional nos ha concedido: “ningún juez o notario podrá negarse a celebrar matrimonios entre personas del mismo sexo”, informó semana minutos después del histórico 6 votos a favor y 3 en contra.
Es imposible no sentirse en un estadio en medio de un partido importante, a reventar de hinchas, toda una comunidad, personas expectantes (aunque inmersas en sus actividades diarias pero pendientes) a un dictamen que permitiría expresar nuestro amor sin límites, sin trabas jurídicas ni extensos papeleos.
Desde 1999 nos la hemos luchado. La senadora Margarita Londoño expone un proyecto de ley que buscaba los derechos patrimoniales y de afiliación a la seguridad social a las parejas del mismo sexo, el cual es archivado por falta de trámite. Londoño fue la primera piedra, la que vislumbró el camino y dio pie a las demás iniciativas de inclusión.
En 2007 la Sentencia C-075 de la Corte Constitucional reconoce que la Ley 54 de 1990 que regula las uniones maritales de hecho heterosexuales, tambien debia proteger la unión de hecho entre personas del mismo sexo. Un paso grande aunque aún insuficiente.
Foto de: noticiasrptv.com
Entre 2010 y 2011 se abre la discusión entre el término familia que culmina con la sentencia C-577 que expresa que la procreación no es un elemento esencial del matrimonio y que las parejas del mismo sexo constituyen una familia.
Armando Benedetti en 2012 habla de Matrimonio en un nuevo proyecto de ley y se establece el primer plazo para el Congreso, que establece que que en caso tal de que éste no se pronunciara al respecto antes del 3 de junio de 2013 podriamos ir a una notaría o donde un juez para solemnizar el vínculo.
Los notarios se “declaran incompetentes” para casarnos y en los juzgados podían tomar la decisión de realizar o no vínculo.
La jueza 67 municipal de Bogotá declaró civilmente casada, por primera vez en Colombia, a una pareja del mismo sexo, nosotros los presentamos. Les realizamos una entrevista que nos otorgó el IV Premio de Periodismo Comunitario.
Carlos Ardila y Gonzalo Ruiz eran el “fenómeno del momento” sentían que era “dignificante comprobar que todas las instituciones del Estado Civil Colombiano están al servicio de todos los colombianos”. Sentían el apoyo a su sentimiento, sentían que podían amarse sin ningún stop a la vista.
“No hay ninguna razón jurídica, moral o ética, que justifique un tratamiento discriminatorio para homosexuales, bisexuales, heterosexuales y asexuales”, así lo expresaban Carlos y Gonzalo tras su acontecimiento histórico aquel 24 de julio de 2013.
El procurador Alejandro Ordóñez se pronuncia y propone la “nulidad” e inicia toda una contienda. Carlos y Gonzalo son entonces “civilmente casados” pero no bajo la figura del matrimonio.
Comienza una diminuta ola de parejas homosexuales a quienes los jueces no conciban impedimento alguno para estar casados. Pero se ven obstaculizados cuando el juez 38 de Bogotá declara nulo uno de los matrimonios ya celebrados.
Foto tomada de: las2orillas.co
El senador Benedetti en octubre de 2013 demanda ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos al Estado Colombiano por violar los derechos de la comunidad LGBT.
El 30 de Julio de 2015 se instaura una Audiencia Pública en la Corte Constitucional con voces a favor y voces en contra, que llevó a seguir replanteando la realidad de las parejas homosexuales y sus derechos.
A pesar de las múltiples voces en contra, el amor prevalece y así lo hemos informado. Se cumple el sueño de muchos, se nos da una voz y se nos permite unirnos en Matrimonio.
