En el marco de las tradicionales fiestas anuales de la independencia de Cartagena, Colombia, se realizó el pasado sábado, 14 de noviembre, la Séptima Marcha de la Diversidad Sexual, donde reinó una “normalidad aparente” según el comunicado de Caribe Afirmativo, organización que vela por los derechos LGBTI en el Caribe Colombiano.
La marcha se realizó con la policía de tránsito de Cartagena a la cabeza y uno que otro miembro esporádico de la policía nacional junto a los participantes, sumando un total de 70 cuerpos policiales en todo el recorrido, una cifra preocupante a la hora de hablar de un evento de grandes magnitudes que lo que hace es celebrar la diferencia y diversidad: “es una cifra ilógica y más si se trata de una ciudad donde el morbo y las ganas de ver a las chicas trans y murmurar cosas […] eran el pan de la noche”.
Frente a las falencias, también cabe resaltar que Cartagena supo aprender a respetar la marcha, teniendo en cuenta que el apoyo institucional más allá de ser visible, fue precario en casos en los cuales quienes se encontraban fuera de la marcha, en medio de la euforia, buscaban tomarse fotografías o realizar burlas contra la población trans y demás marchantes.
Entre otras dificultades, la marcha fue interrumpida en la icónica Torre del Reloj, pero afortunadamente quienes iban en ella no lo permitieron, la policía de tránsito en su búsqueda de normalizar el tráfico obstaculizó el recorrido hasta el Parque de la Marina, los externos aprovecharon el caos para soltar pólvora y tirar espuma indiscriminadamente, la carroza principal se detuvo porque su conductor no quiso ingresar al parque y la Secretaria de Participación de la Alcaldía fue agredida por un oficial de policía para que bajar de la tarima.
Sin embargo, la marcha pudo llevarse a cabo hasta el final y se alzó la voz como población LGBTI. Seguimos avanzando en la lucha por la igualdad ¡Felicitaciones a Caribe Afirmativo y las organizaciones del caribe colombiano que trabajan en pro de la diversidad!