Un lugar de visita obligada en Colombia es Cartagena, la ciudad idílica donde la fiesta nunca acaba.
Desde el amanecer con el sol como protagonista en las calles hasta la enigmática noche en medio de murallas, plazas, restaurantes, terrazas y discotecas, la Heróica nos envuelve en su magia.
Como parte de este fantástico encanto, Cartagena no podía quedarse sin un espacio pensado para todo aquel que sueña con irse de fiesta lejos de los prejuicios, y libre de las etiquetas para noches increíblemente candentes.
Junto al muelle de los pegasos, en medio de la ciudad antigua, sobre la calle del Arsenal, al lado de la tradicional discoteca Mister Babilla, está una imponente fachada azul celeste con un logo dorado en medio de ella, “Club D8”, El lugar donde la rumba gay se adueña de las noches caribeñas.
Ya con dos años de existencia cumplidos y conmemorados el pasado sábado 10 de junio, Club D8 se ha convertido en el epicentro de la mejor fiesta gay de la ciudad.
Entre globos, luces, música y baile, el emblemático lugar celebró su segundo aniversario como la discoteca gay más exclusiva de la capital del departamento de Bolívar. Dos años abriendo de jueves a sábado y domingos festivos, con fiestas temáticas y una oferta diferencial en licores y experiencias.
Desde una inmensa casa antigua sobre la calle más pintoresca cerca a la bahía de Las Ánimas se erigen tres pisos entre los cuales se ubican los 4 ambientes de este exclusivo club.
Luego de cruzar la inmensa puerta colonial de entrada al lobby de D8 un salón dorado recibe a los visitantes como antesala a todo un mundo de placeres que tiene un comienzo pero nunca sabe cuándo o cómo terminar. El primer espacio dentro de la disco, está dedicado a la electrónica, el lugar deseado que cada fin de semana visitan DJ’s nacionales e internacionales, la plaza principal de cada fiesta donde gogo dancers, bailarines y divas se adueñan del escenario para despertar las pasiones de turistas y locales.
Por unas escaleras que pareciera que lo llevan a uno a su propio cielo, se encuentra un segundo piso con un salón colorido que se enmarca en la sonada y celebrada frase “perreo a poca luz”, donde la consola del DJ abre el espacio a un piso de madera hecho para evolucionar con la noche a ritmo crossover.
Junto al salón crossover, lejos del aire acondicionado y del bullicio de la noche, se encuentra la terraza, un espacio ideal para pasar un rato de conversación entre amigos y desconocidos, al calor de la brisa caribeña y en compañía de aquellos que simplemente necesitan un nuevo aire en la noche, antes de visitar el cuarto ambiente, ese donde a través de las escaleras, subiendo al tercer piso, te conducen al lugar donde entre la oscuridad y la música de los pisos inferiores, el erotismo es protagonista, un espacio indescriptible que simplemente debes vivir.
Club D8, la discoteca soñada de Cartagena, pensada para la fiesta y la relajación entre el estilo y la exclusividad, con sus dos años, le demuestra al mercado que está dispuesta a evolucionar con sus visitantes a la vez que conserva su encanto, tal y como La Heroica.
D8 no es sólo para festejar, también es para acomodarse al buen servicio de quienes te reciben, como Eduardo, su administrador y host, un hombre sensual que sabe de los tratos que merece cada visitante del lugar. El, junto a su equipo de staff, te harán vivir una experiencia que nunca olvidarás.