La asociación Ben Amics pide al Ayuntamiento que investigue los casos de homofobia en la Policía de Palma de Mallorca en España.
Una agente de la Policía Local de Palma ha denunciado ante la Fiscalía haber sufrido un trato humillante entre 2007 y 2009 por ser lesbiana. Asegura además que padeció abusos recurrentemente por parte de sus compañeros de unidad, todos hombres, quienes la incomodaban con palabras como “bollera” o “tortillera”.
La agente de policía se encontró un huevo reseco en sus pertenencias y tuvo que escuchar cómo le preguntaban entre risas si le había “gustado la tortilla”.
Su superior hizo caso omiso de sus quejas por los abusos, no quiso llevar la denuncia más allá porque no sentía que hubiera la sensibilidad política en la administración para que se corrigieron las actitudes discriminatorias contra ella.
Ben Amics tomó este caso nuevo caso con otros dos episodios de tratos discriminatorios contra ciudadanos solo por ser homosexuales.
La agente se pronunció ante el apoyo de esta organización:
Ahora la situación es distinta y sabía que iba a encontrar amparo en la Fiscalía. También sé que el Ayuntamiento de Palma y en concreto la regiduría de Seguridad Ciudadana están dispuestos a trabajar para erradicar estos temas. De hecho animo a todos mis compañeros y compañeras a denunciar estas injusticias y casos de abusos para dejar atrás de una vez por todas esa imagen de policía arcaica y rancia.
Jan Gómez, presidente de la asociación Ben Amics, recuerda que su entidad realizó un llamamiento público para que se denuncien más casos de discriminación por identidad sexual en la Policía Local de Palma.
Gómez afirma tener sospechas de que los agentes investigados por estos delitos “perseguían a un perfil muy concreto de hombres homosexuales que no viven abiertamente su homosexualidad y que por lo tanto se encuentran indefensos ante casos de abuso, ya que denunciar públicamente les conllevaría una salida del armario”.