El Departamento de Educación de EE.UU. busca orientar a las escuelas para que los niños en transición de género sean tratados de acuerdo con su identidad.
Las escuelas tienen que buscar un equilibrio entre los derechos civiles de los estudiantes transgénero y las inquietudes de sus compañeros, los padres y la comunidad educativa.
Como parte de un acuerdo con los departamentos federales de Justicia y Educación que sirvieron de base para la directiva nacional, los estudiantes pueden usar el sanitario, vestuario o cabaña de campamento que corresponda a su género reconocido fuera de la escuela, dijo el jefe del distrito, David Vannasdall.
“Lo que jamás ha ocurrido es que un estudiante diga, ‘hoy soy un chico, mañana soy una chica”’, dijo Vannasdall. “Cuando los estudiantes llegan al punto de pedir ayuda, ya se presentan en todos los aspectos de la vida como de tal o cual género”.
El gobierno había advertido a las escuelas antes del viernes que negar a los estudiantes transgénero el acceso a las instalaciones y actividades correspondientes era ilegal de acuerdo con su interpretación de las leyes federales contra la discriminación sexual. Pero, por primera vez, la nueva orientación aconseja cómo adaptarse a las necesidades de intimidad de los jóvenes que no son transgénero.
Aunque la directiva no es obligatoria por ley y la Corte Suprema podría decidir si las leyes federales de derechos civiles protegen a los transgénero, las escuelas que se nieguen a cumplirlas podrían enfrentarse a demandas por parte del gobierno y un recorte al apoyo financiero de la federación.