La noche lluviosa no fue impedimento para que docenas de personas se dieran cita en Club Oráculo, un mundo que abrió sus puertas para ofrecer una experiencia atrevida pensada para todo tipo de miembros.
Si se trata de fiesta y vida nocturna, Medellín ahora cuenta con innumerables sitios en toda su área metropolitana; la zona rosa del poblado es el epicentro de ello y podemos encontrar fondas, bares, discotecas y todo tipo de espacios que ofrecen sus servicios para el disfrute de la noche.
De todos esos sitios, estamos seguros que casi ninguno ofrece un ambiente tan único, original, libre y atrevido como lo hace Club Oráculo quien se inauguró el pasado viernes 18 de mayo tomando gran protagonismo en su primer fin de semana en la ciudad de Medellín.
Club Oráculo se abre como una propuesta pensada para impactar. Si crees que su nombre es particular, espera a conocer su interior, un conjunto de simbolismos, colores y texturas que recrean un mundo misterioso, que seduce y te invita a descubrirlo.
Su escenografía es cargada, exagerada e imponente, trayendo consigo una exploración de sensaciones únicas que de inmediato no entiendes o no conectas, pero en las cuales quedas inmerso luego de pasar un par de horas allí.
Este es un espacio amplio compuesto por dos plantas: Al entrar, lo primero que ves, es un enorme trasero haciendo honor al juego de palabras que tiene su nombre, de ahí en adelante, te encuentras con un largo pasillo iluminado con luces de neón, una grandiosa área de bar adornada con antorchas, grandes lámparas extravagantes en su lujo, espejos iluminados, cuadros alusivos a la temática, en fin, un conjunto de artefactos puestos minuciosamente que no puedes dejar de detallar.
En la parte de atrás se ubica una amplia discoteca adornada por una gigantesca bola de cristal en el techo, abajo, dos jaulas, construidas sobre un par de bocas a lado y lado de la pista de baile donde el show en vivo de media noche a cargo de los gogo dancers sube la temperatura de los asistentes con sexys y arriesgados bailes al ritmo de las pistas musicales más reconocidas y recordadas.
De las cosas más interesantes de este Club, son sus baños, Oráculo no le teme a la diversidad, pues en su mundo no existen las separaciones binarias del cuerpo o las etiquetas, ofreciendo un espacio unisex para que todos, sin distinción alguna compartan.
Es atrevido, sí, lo es, porque no teme recrear un ambiente de libertad y unión sin importar quién seas, qué busques o qué deseas, es un sitio que se abre a ti para hacerte parte de su lenguaje que más que comprendido tiene que ser vivido.
Nuestra noche en Club Oráculo fue más de lo que esperábamos, su energía, esencia e identidad nos permitieron descubrir un sitio que ofrece algo más que un espacio para ‘rumbear’, un espacio que cree en lo diverso, en el ser y que cree en un lugar incluyente que reúne a quién decide dejar atrás cualquier tipo de cuestionamiento.
Por cierto, hicimos un pequeño vídeo recopilatorio de Club Oráculo y sus shows en vivo. Disfrútenlo y… Este fin de semana qué ¿nos vemos en Oráculo?
