Uno de los mayores atractivos de Colombia es su posición geográfica privilegiada, ubicado en el extremo norte de Suramérica y en medio de todo el Caribe, cuenta con costas sobre los dos océanos, Atlántico y Pacífico, hecho que le brinda atractivos naturales que bien pueden considerarse paraísos a la orilla del mar, como las hermosas zonas coralinas del Mar Caribe o la oportunidad de ver a las majestuosas ballenas jorobadas en la costa pacífica. Acá, sólo una pequeña muestra, de norte a sur, de los encantos de las playas Colombianas.
Punta Gallinas, al extremo norte:
Este lugar, dentro del territorio colombiano habitado por la etnia indígena Wayúu, es el punto más al norte de toda Suramérica.
Se ubica en el Departamento de La Guajira y se puede llegar por tierra, con planes guiados, desde Riohacha, la capital del Departamento; playas vírgenes y hamacas para dormir y disfrutar de este lugar.
Cabo de La Vela, magia pura:
También en el Departamento de La Guajira y en territorio ancestral Wayúu, se ubica este lugar que sin duda alguna es uno de los escenarios naturales más espectaculares de Colombia. Como límite entre el mar y el desierto, este lugar sagrado para los indígenas de la región ofrece unas playas tranquilas con aguas tranquilas y hamacas para descansar, lugar ideal para olvidarse del caos de la ciudad por unos buenos días.
Parque Nacional Natural Tayrona, belleza natural:
A 45 minutos de Santa Marta y como parte de la Sierra Nevada de Santa Marta se encuentra uno de los santuarios naturales más importantes del país, el Parque Nacional Natural Tayrona. Con ecosistemas únicos en el mundo y una inmensa biodiversidad, este parque natural cuenta con algunas de las playas naturales más hermosas del mundo, reconocidas por revistas especializadas en el tema, todo un paraíso para viajeros de todo el mundo.
Puerto Velero, viento y aventura:
A media hora en automóvil de Barranquilla (en inglés), capital del Departamento del Atlántico, se encuentra esta playa de aguas tranquilas y planas, ideal para la práctica de deportes como el kiteboarding, el kitesurfing o el windsurf. Con instructores calificados y una corriente de viento casi permanente de una velocidad promedio de 15 nudos, este lugar es un escenario ideal para aventurarse en los deportes sobre el agua.
Isla Barú, la vecina de Cartagena:
Cercana a las costas de la Ciudad Amurallada, se encuentra Isla Barú, una encantadora formación coralina de islas con playas blancas y tranquilas, alejadas del comercio y del turismo tradicional de Cartagena. Con acceso por mar o por vía terrestre, esta zona de manglar y rodeada de corales inimaginables, es un escenario ideal para el buceo, el descanso y la relajación.
Archipiélago de San Bernardo, encanto en 10 islas:
En pleno Golfo de Morrosquillo, al sur de Cartagena, se ubica este conjunto de 10 islas de una cadena coralina que impacta por la belleza de sus playas y los colores de sus aguas. Este popular destino se extiende mar adentro unos 15 km y está compuesto por las islas Cabruna, La Palma, Mangle, Tintipán, Panda, El Islote, Múcura, Maravilla y Ceycén, y por una artificial, Santa Cruz del Islote, construida por sus habitantes. Con una oferta variada en restaurantes típicos costeros y hospedajes en algunas de sus islas, se convierte en otra gran opción para alejarse de tierra firme por algunos días.
San Andrés, el mar de 7 colores:
Al norte de Colombia, parece casi un escenario perdido en medio del Mar Caribe. En medio de reggae, calypso, cumbia y vallenato, este lugar al que se llega en avión es un lugar para olvidarse del resto del mundo. Con playas de arenas blancas, sol y un impactante mar de 7 colores rodeado de zonas coralinas y una inmensa variedad de vida marina, San Andrés es uno de los lugares que no puedes dejar de visitar en medio del Caribe.
Nuquí, tradición pesquera y naturaleza:
Cerca al Parque Nacional Natural Utría, se ubica este santuario natural, con playas llenas de la biodiversidad propia de Colombia. Las aguas de estas playas ofrecen la oportunidad perfecta para los practicantes del surfing, además de un espectáculo natural con la llegada de tortugas, ballenas y una gran variedad de peces que invitan al buceo y a la exploración.
Bahía Solano, el parque de las ballenas:
Ubicada en el Departamento del Chocó, en la costa pacífica colombiana, este lugar de playas naturales y cascadas espectaculares provenientes de la Serranía del Baudó, es un refugio natural de belleza y vida. Lugar de paso de especies de peces voladores y aves migratorias, en la temporada de julio a octubre se convierte en el escenario perfecto para disfrutar de la belleza y exuberancia de las ballenas jorobadas, las más grandes del planeta.
Ladrilleros y Juanchaco, el sabor del Pacífico:
A poca distancia del puerto de Buenaventura, se encuentran las playas de Ladrilleros y Juanchaco, pequeños pueblos de pescadores que crecen en medio del mar y la selva. Con una infraestructura hotelera aceptable para cualquier mochilero, estas playas son el lugar perfecto para disfrutar de los sonidos de la música del Pacífico colombiano, en medio de los ritmos que sus habitantes disfrutan con tambores y marimbas (instrumento de origen africano).
Por: Pedro González
