La Cámara de Diputados de Italia aprobó este miércoles una ley a favor del matrimonio entre parejas del mismo sexo.
El Gobierno logró este miércoles, por 369 votos a favor, 193 en contra y dos abstenciones, la aprobación definitiva. El Parlamento dio luz verde al documento con el esperado rechazo de la oposición al Gobierno del primer ministro Matteo Renzi y el de la Iglesia. Tras la decisión, los contrarios a la ley de uniones civiles declararon estar dispuestos a organizar un referéndum revocatorio.
Matteo Renzi ha colgado en su página de Facebook un comentario en el que se siente orgulloso de su proyecto: “Hoy es un día de fiesta para muchos (…). En estas horas decisivas tengo junto a mi corazón el pensamiento y el recuerdo de Alessia [Ballini, alcaldesa de San Piero a Sieve, luchadora por los derechos de los homosexuales, fallecida en 2011]. Y esto me basta. Porque las leyes son hechas para las personas, no para las ideologías. Para quien ama, no para quien proclama. Lo hacemos poniendo la moción de confianza porque ya no se podía retrasar más después de años de intentos fallidos. Lo hacemos con humildad y valentía”.
El 26 de febrero pasado el Primer Ministro italiano logró que el Senado aprobara al proyecto, con 173 votos a favor y 71 en contra. Si bien los homosexuales italianos tendrán por fin derecho a regularizar su situación, la nueva ley sancionada por el Parlamento excluye la posibilidad de que uno de los miembros de la pareja adopte a los hijos naturales de su cónyuge.
La diputada por el Partido Democrático Monica Cirinná, quien presentó el proyecto al Senado, reconoció tras su aprobación a esa instancia que esa era una victoria agridulce. Es una victoria con un agujero en el corazón porque no tiene en cuenta a los hijos que no podrán ser adoptados por quienes consideran sus padres o sus madres.
El texto, además, establece ayuda recíproca moral y material, la pensión de supervivencia, el permiso de residencia para el cónyuge extranjero y también la posibilidad de adquirir el apellido del compañero.
