El Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH), es uno de los agentes infecciosos de mayor impacto en la salud pública, además de ser considerado por el Sistema General de Seguridad Social en Salud como una patología de alto costo, ya que posee un impacto económico sobre las finanzas del sistema y afecta directamente la calidad de vida de la persona que vive con VIH y su familia, incluidas las repercusiones laborales.
Actualmente los tratamientos antirretrovirales no curan el VIH, pero evitan la reproducción del virus, impidiendo así la destrucción de las defensas y el desarrollo de enfermedades oportunistas.
Posiblemente has oído hablar de la PrEP, y piensas en la posibilidad de hacer uso de esta medida preventiva para VIH.
La PrEP, es una de las herramientas innovadoras para la prevención del VIH en el marco de estrategias combinadas, donde personas VIH negativos pueden consumir medicamentos antirretrovirales, que les permitan disminuir el riesgo a adquirir la infección antes de exponerse a la misma.
Pero, ¿Qué significa la PrEP?
Pre: Antes (previa).
Exposición: Tener contacto con el VIH.
Profilaxis: Tratamiento para prevenir que ocurra la infección.
Se han realizado muchos estudios a nivel mundial, los cuales han permitido demostrar que esta medida puede reducir el riesgo de infección en un 92% a 99%, con una toma constante, es decir tomándolo de manera diaria de forma tal que este medicamento alcance una concentración en el cuerpo que pueda generar la acción protectora.
Al no llevar a cabo la toma diaria la concentración del medicamento se puede reducir afectando su capacidad de protección ante el virus. Por eso, es importante que la toma de la PrEP sea realizada con acompañamiento de un equipo en salud, que pueda apoyarte en la forma óptima de su uso y brindarte un servicio integral que garantice no solo el adecuado uso de la PrEP, sino de manera simultánea la prevención de los posibles efectos secundarios que se puedan derivar de la misma.
Ahora, ¿cómo saber si puedes usar PrEP?
Es importante que recuerdes, que el uso de PrEP no es la única forma de prevenir la infección por VIH, debes considerar todas las opciones para que optes por aquella que consideras puedes usar de manera adecuada y que responde a tus necesidades (preservativo o, en caso que tu pareja sea VIH positivo, el tratamiento e indetectabilidad del otre).
La PrEP, se recomienda a aquellas personas que por alguna condición se pueden ver expuestas frecuentemente a la infección, ejemplo de ello puede ser: Si no usas de manera constante el preservativo, si tienes relaciones sexuales con personas que se encuentran expuestas al VIH, tienes relaciones sexuales con personas que consumen drogas inyectables o tu consumes drogas inyectables y compartes el material de inyección, tienes relaciones sexuales sin preservativo con una persona VIH positiva, en todos los casos siempre que no sea indetectable.
También se recomienda el uso de PrEP si haces parte de poblaciones que presentan un alto riesgo a la infección como hombres que tienen sexo con hombres, mujeres transgénero o personas que desarrollan actividades sexuales pagas y tengan relaciones sexuales no protegidas el 100% de las veces.
¿Dónde puedes obtener la PrEP?
En Colombia, se iniciará a un proyecto que dará acceso al uso de PrEP en dos casos: ser hombre que tiene relaciones sexuales con otros hombres, o ser una mujer Trans.
No quiere decir que la PrEP vaya a ser exclusivo para estas poblaciones.
Se implementará un proyecto piloto que permitirá obtener las evidencias y elementos para que esta estrategia se convierta en política pública y, en un futuro cercano, se pueda extender a todos aquellos que la necesiten.
Actualmente la PrEP está aprobada en Bogotá, debes de realizar una encuesta para poder identificar si haces parte de esa “población de alto riesgo” y así asignar una cita médica con los especialistas.
Es inevitable reconocer la importancia de este paso en cuanto a las acciones que giran en torno al VIH en Colombia, si bien es un piloto, el resultado de éste va a permitir abrir la población enfoque y dar más cobertura a otras personas.
No hay “poblaciones de riesgo”, sí “comportamientos riesgosos”.
Pertenecer a un cierto grupo no es un factor decisivo de la transmisión del VIH; sí lo es, en cambio, determinado comportamiento (como no utilizar preservativo en las relaciones sexuales o compartir elementos corto punzantes). Además da lugar a una falsa sensación de seguridad entre quienes no se identifican con ese grupo.
Situación global del VIH en el último año:
- 37.9 millones de personas viven con VIH.
- 61.47% estaban en tratamiento.
- 1.7 millones de personas adquirieron VIH.
- En Colombia 160.000 personas viven con VIH.
(Según fuente ONUSIDA/ Ministerio de salud y Desarrollo Social de la Nación Argentina – Datos hasta 2018)
Con este panorama, está claro que debemos empezar a visibilizar el VIH/SIDA, los derechos sexuales y reproductivos, las otras ITS, las rutas de atención en salud, entre otros aspectos que nos exigen análisis.
Quedan algunas reflexiones:
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- ¿Dónde quedan las personas que no hacen parte o no se identifican en esa población enfoque?
- ¿Cuántas personas hoy podemos estar evitando que se infecten si tuvieran acceso a la Profilaxis Pre-Exposición?
- ¿Cuántas personas hoy podemos estar evitando que se infecten si tuvieran acceso a la prueba de VIH?
- ¿Qué pasa con la atención de la población extranjera inmigrante que se encuentra de manera irregular en el país?
- ¿Estamos preparados para dar respuesta a las otras ITS?
Las respuestas las seguiremos esperando…
Este artículo hace parte de un trabajo de redacción realizado por el autor resultado del Diplomado de Periodismo para la Diversidad: Historias No Contadas “Narrando desde otro punto de vista”, iniciativa creada por egoCity con la Secretaría de Comunicaciones de la Alcaldía de Medellín y la certificación de CEDENORTE Institución Técnica, para la visibilización de los sectores poblacionales LGBTI de Medellín.