Esta estación de radio gay ubicada en Túnez desafía las prohibiciones de la homosexualidad en el mundo árabe.
Shams Rad se emite desde el 11 de Diciembre en Túnez, país estricto con la homosexualidad y que tiene detrás a Shams, la asociaón más visible y combativa en pro de los derechos de la población LGBT y cuya financiación está patrocinada por la embajada Holandesa.
La homosexualidad en este país está denominada como un delito en el Código Penal el cual se puede castigar hasta con tres años de cárcel. Sumando a ello, los promotores de la emisora, desde que están al aire han recibido más de 4.000 amenazas.
Sin embargo, toda esta falta de garantías no han sido impedimento para que un joven de 25 años, Bouhdid Belhedi dirija a Shams Rad, la “primera estación de radio LGBT del mundo árabe”.
Esta radio estación toca temas enfocados en la cultura, política y economía siempre desde una perspectiva diversa con el objetivo de “difundir un discurso de tolerancia y hacer comprender a todos los tunecinos que la homosexualidad no es una enfermedad.”
Shams Rad para sortear el veto gubernamental se emite por Internet. Según este medio de comunicación un aproximado de 66 personas fueron detenidas bajo la acusación de homosexualidad y por lo menos 196 están tras las rejas por este cargo.
En Septiembre del año pasado las autoridades se comprometieron a no seguir practicando el test anal, con el cual se busca averiguar si un hombre es gay o no a pesar de que la ciencia desmiente su validez y las asociaciones de derechos humanos le cataloguen de tortura.
Según Bouhdid Belhedi, Sham Rad es escuchada por más de 10.000 oyentes en 15 países diferentes emitiéndose 6 veces por semana.
Aunque su contenido abarca gran cantidad de temas LGBT, sus conductores prefieren no referirse a sus sexualidades.
El problema de la homosexualidad en Túnez va directamente ligado con las costumbres culturales y religiosas de su sociedad, que ven la homosexualidad y los tópicos LGBT como un asunto de rechazo.
