Movimiento LGBTIQ en Cuba decide no bajar la cabeza ante la suspensión de su marcha del Orgullo y resiste por medio de manifestaciones “Sí se puede” y “Cuba Diversa”.
El CENESEX (Centro Nacional de Educación Sexual) dirigido por Mariela Castro, institución oficialista bajo la tutela del Ministerio de Salud publicó anteriormente la cancelación de la tradicional “Conga”, que representaba un avance contra la homofobia, transfobia y lesbofobia en Cuba desde hace una década.
La cancelación de la “Conga”, desencadenó que se llevara a cabo una marcha sin autorización previa el pasado día sábado 11 de mayo la cual se vio interrumpida por un fuerte dispositivo policial, los cuales, de acuerdo con diferentes declaraciones, minutos antes “observaron la manifestación con recelo”.
“No me parece justa (la interrupción de la marcha) para nada, porque no estamos haciendo nada malo”, dijo a la AFP Laydel Alfonso, manifestante de 31 años y trabajador de un restaurante privado, quien llevaba un antifaz plateado y la bandera del arcoiris.
La explicación de cancelación de la tradicional “Conga”, de acuerdo con un comunicado a la agencia de noticias EFE por parte de CENESEX, se da por “nuevas tensiones en el contexto internacional y regional”, ya que ésta iba a ser utilizada “con fines desestabilizadores por la contrarrevolución”.
El comunicado argumentaba:
“Las nuevas tensiones en el contexto internacional y regional afectan de manera directa e indirecta a nuestro país y tiene impactos tangibles e intangibles en el normal desenvolvimiento de nuestra vida cotidiana y en la implementación de las políticas del estado cubano”
Más de cien activistas hicieron parte de la marcha no autorizada que luego de haber pasado por el Paseo del Prado fue intervenida por la policía, evitando que llegara al Malecón como estaba previsto en el recorrido. Al menos tres activistas fueron detenidos.