Es un momento histórico que nos sitúa como protagonistas del cambio que soñamos.
El Pacto Colombia con las Juventudes se firmó entre el Gobierno Nacional y liderazgos juveniles del país, pero el camino no termina ahí; ahora en nuestras manos está hacer curaduría, seguimiento y convertir en realidad una Colombia más equitativa para todxs.
En cabeza del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), desde la Dirección de Adolescencia y Juventud, junto con la Consejería Presidencial para la Juventud se empezó a construir desde mayo hasta agosto de este año, una serie de conversaciones que tenían como objetivo entender las necesidades que liderazgos juveniles estaban exigiendo como parte del paro nacional que empezó el 28 de abril y buscar generarles solución a corto, mediano y largo plazo, de manera conjunta con las comunidades.
A julio de este 2021, de acuerdo con el DANE, la tasa de desempleo se encontraba en el 14,3%, una cifra preocupante y sumamente problemática, sin embargo, inferior 5,9 puntos porcentuales a la tasa que alcanzó el país durante el mismo mes del año anterior (2020), un 20,2%1, resultado de la cuarentena por la pandemia de la covid-19 y la enorme crisis económica consecuencia también de las ineficaces medidas del Estado. Durante el 2020, la economía colombiana decreció un 6.8%2.
A nivel global las medidas tomadas para responder a la pandemia dejaron en evidencia una gran cantidad de problemáticas sociales, políticas, económicas y ambientales. En Colombia el descontento y la molestia de la ciudadanía de a pie incendió los ánimos de la movilización social que se levantó con toda la fuerza para exigir acciones y mecanismos para la garantía de derechos.
El 28 de abril comenzó una oleada de acciones en toda Colombia que conectó los dolores, necesidades y falencias que todo el territorio colombiano enfrenta desde las más de 50 millones de personas que lo habitan. Desde la Guajira hasta el Amazonas y desde Guainía hasta San Andrés y Providencia, lxs colombianos salieron a las calles, a pesar del covid-19 para exigir oportunidades, soluciones… Un futuro.
“Cuando lo pierdes todo, ya no queda ni el miedo” arenga popular durante las marchas del Paro Nacional.
El Pacto Colombia con las Juventudes fue pensado como un proceso participativo, en el cual se llevaron a cabo 492 mesas de participación y escucha activa en los 32 departamentos, con 14.663 jóvenes en todo el país donde se identificaron 452 problemáticas con presencia en más de 200 municipios, alineadas en 12 líneas de acción:
- Trayectorias educativas.
- Empleo, emprendimiento y desarrollo económico.
- Arte, cultura, deporte y recreación.
- Salud y bienestar.
- DDHH, convivencias y paz con legalidad.
- Ambiente, sostenibilidad y desarrollo.
- Equidad de género, identidad y diversidad.
- Conectividad, innovación y cierre de brecha digital.
- Institucionalidad democrática y participación ciudadana.
- Vivienda, desarrollo integral y superación de la pobreza.
- Territorio y desarrollo rural.
- Enfoque diferencial e inclusión.
La destinación presupuestal contará con $33.5 billones para acciones que se ejecutarán en corto, mediano y largo plazo hasta el 2030.
“Uno de los logros más importantes que ha tenido el pacto es poder visibilizar un enfoque interseccional, diferencial y de género. Estábamos con miradas muy generales sobre la salud, el empleo y la vivienda, sin saber que hay poblaciones que por sus condiciones materiales no tienen oportunidades para acceder a las políticas y acciones públicas, entonces este enfoque que se ha dado gracias a movilizaciones feministas y LGBTI+ le han aportado a este pacto poder visibilizar otras necesidades, condiciones que nos hacen vulnerables y cómo poder actuar de una manera más confrontativa ante otras realidades” Sara Jaramillo Gómez, representante estudiantil y activista social.
Es el momento de una Colombia plural, esa que las juventudes están concibiendo desde todo el territorio para celebrar culturas, capacidades, etnias, sexualidades, credos, géneros e ideologías diferentes para crear redes de apoyo y gestión, una democracia joven que combate el adultocentrismo y teje un mejor futuro.
Artículo publicado también en nuestra edición especial impresa de sept-octubre 2021 con el apoyo de la Alcaldía de Medellín: Edición #16 (Encuéntrala en línea)
